Incluye en tu dieta una buena cantidad de fibra, ya que esta ayuda a reducir el nivel de colesterol. Mantén tu peso ideal. Toma jugos frescos, especialmente de zanahorias, apio y betabel. Reduce la cantidad de grasa saturada y colesterol en tu dieta como la grasa animal, manteca de cerdo y mantequilla.
Consume leche baja en grasa. Haz ejercicio regular, pero con moderación. Antes de iniciar cualquier programa de ejercicio debes consultar a tu médico. Trata de evitar la tensión y el estrés.
OBSERVACIONES: Mujeres embarazadas o lactando, deberán consumirlo bajo prescripción médica.